viernes, 13 de enero de 2012

Liberalismo Mexicano

Actuante en el terreno de los hechos con un fundamento teórico de calidad semejante al de cualquier otra corriente filosófica, en opinión de Abelardo Villegas. No es una filosofía académica, acartonada.
Mientras que el liberalismo en Europa es el resultado de un largo proceso histórico que comprende el nacimiento, crecimiento y triunfo de la burguesía, el liberalismo latinoamericano no está respaldado por ese gran proceso histórico; se trata de una doctrina importada, sostenida por la clase media ilustrada que se encontraba en una etapa precapitalista, anterior a la revolución industrial clásica de los tiempos modernos.
El liberalismo en México y en Latinoamérica surgió como un programa, como un proyecto que permitiría salir del atraso y la “barbarie” en que nos había postrado la Colonia, y llegar a ser como los países modernos: Francia, Inglaterra y Estados Unidos
En el aspecto económico propone que, para el equilibrio perfecto de la marcha económica de la sociedad, el Estado debe abstenerse de toda intervención, y dejar su curso natural a la libre competencia, osea, que cada individuo siga inteligentemente su propia conveniencia, con lo que se conseguirá el bienestar de todos los otros individuos.
Estos postulados, que forman la doctrina ideal y que preconizan insistentemente la búsqueda de la libertad del hombre como un fin en sí misma, es el ideal e los iniciadores de las revoluciones del siglo XIX, cuyos postulados prácticos, son: 1.-Soberanía del pueblo frente a la autoridad real y 2.- El racionalismo religioso frente a la autoridad del Magisterio de la Iglesia.
OSÉ MARÍA LUIS MORA
Nace el 12 de octubre de 1794, en Chamacuero, Guanajuato.
Su aptitud nata para la política encuentra terreno propicio para participar en la agitada vida pública de su tiempo y, sin limitarse al ejercicio de la cátedra y de su ministerio sacerdotal, participa como articulista en varios periódicos de su época, haciendo clara defensa de los principios liberales al tiempo que se afilia al partido político de tendencia anti-imperialista.
Debido a la violencia de la vida política de su tiempo, el Dr. Mora tuvo que abandonar el país el 6 de diciembre de 1834, y después de pasar por los Estados Unidos, fue a radicar en París el siguiente año.
Sus dos libros principales son: “México y sus Revoluciones” y “Obras Sueltas”. En el primero analiza objetivamente la vida política de México a partir de la Independencia y en el segundo, en donde recopila la mayor parte de sus artículos periodísticos, se puede encontrar el rico contenido de su pensamiento.
Los pensadores europeos que influyeron en el pensamiento del Dr. Mora y que son citados por él, son Bentham, en lo que se refiere a la lucha contra el absolutismo de los reyes; Montesquieu, en el aspecto de la abstención del Estado en la regulación de la vida económica de la sociedad y Voltaire, en lo que se refiere a la constitución de la sociedad y el origen de la autoridad en su relación con el problema de la libertad.
Falleció en la ciudad de París el 14 de julio de 1850.
POSITIVISMO
Es un sistema de filosofía basado en la experiencia y el conocimiento empírico de los fenómenos naturales, en el que la metafísica y la teología se consideran sistemas de conocimiento imperfectos e inadecuados.
El término positivismo fue utilizado por primera vez por el filósofo y matemático francés del siglo XIX Auguste Comte.
Comte eligió la palabra positivismo sobre la base de que señalaba la realidad y tendencia constructiva que él reclamó para el aspecto teórico de la doctrina. En general, se interesó por la reorganización de la vida social para el bien de la humanidad a través del conocimiento científico, y por esta vía, del control de las fuerzas naturales. Los dos componentes principales del positivismo, la filosofía y el Gobierno (o programa de conducta individual y social), fueron más tarde unificados por Comte en un todo bajo la concepción de una religión, en la cual la humanidad era el objeto de culto. Numerosos discípulos de Comte rechazaron, no obstante, aceptar este desarrollo religioso de su pensamiento, porque parecía contradecir la filosofía positivista original.
Muchas de las doctrinas de Comte fueron más tarde adaptadas y desarrolladas por los filósofos sociales británicos John Stuart Mill y Herbert Spencer así como por el filósofo y físico austriaco Ernst Mach.
Los positivistas hoy en día, que han rechazado la llamada escuela de Viena, prefieren denominarse a sí mismos empiristas lógicos para disociarse de la importancia que dieron los primeros pensadores a la comprobación científica.
Mantienen que el principio de verificación en sí mismo es inverificable en el campo filosófico.
AUGUSTO COMTE
Filósofo positivista francés, y uno de los pioneros de la sociología. Nació en Montpellier el 19 de enero de 1798.
Para dar una respuesta a la revolución científica, política e industrial de su tiempo, Comte ofrecía una reorganización intelectual, moral y política del orden social. Adoptar una actitud científica era la clave, así lo pensaba, de cualquier reconstrucción.
Afirmaba que del estudio empírico del proceso histórico, en especial de la progresión de diversas ciencias interrelacionadas, se desprendía una ley que denominó de los tres estadios y que rige el desarrollo de la humanidad. Analizó estos estadios en su voluminosa obra Curso de filosofía positiva (6 vols., 1830-1842). Dada la naturaleza de la mente humana, decía, cada una de las ciencias o ramas del saber debe pasar por "tres estadios teoréticos diferentes: el teológico o estadio ficticio; el metafísico o estadio abstracto; y por último, el científico o positivo". En el estadio teológico los acontecimientos se explican de un modo muy elemental apelando a la voluntad de los dioses o de un dios. En el estadio metafísico los fenómenos se explican invocando categorías filosóficas abstractas. El último estadio de esta evolución, el científico o positivo, se empeña en explicar todos los hechos mediante la aclaración material de las causas. Toda la atención debe centrarse en averiguar cómo se producen los fenómenos con la intención de llegar a generalizaciones sujetas a su vez a verificaciones observacionales y comprobables. La obra de Comte es considerada como la expresión clásica de la actitud positivista, es decir, la actitud de quien afirma que tan sólo las ciencias empíricas son la adecuada fuente de conocimiento.
Cada uno de estos estadios, afirmaba Comte, tiene su correlato en determinadas actitudes políticas. El estadio teológico tiene su reflejo en esas nociones que hablan del Derecho divino de los reyes. El estadio metafísico incluye algunos conceptos tales como el contrato social, la igualdad de las personas o la soberanía popular. El estadio positivo se caracteriza por el análisis científico o "sociológico" de la organización política. Aunque rechazaba la creencia en un ser transcendente, reconocía Comte el valor de la religión, pues contribuía a la estabilidad social. En su obra Sistema de Política Positiva, propone una religión de la humanidad que estimulara una benéfica conducta social. La mayor relevancia de Comte, sin embargo, se deriva de su influencia en el desarrollo del positivismo.
Los últimos años del pensador francés quedaron marcados por la alienación mental, las crisis de locura en las que se sumía durante prolongados intervalos de tiempo. Murió en París el 5 de septiembre de 1857.
JUSTO SIERRA
Escritor, periodista, educador y político mexicano, hijo del novelista yucateco Justo Sierra O'Reilly. Fue colaborador de El Renacimiento, la revista de Altamirano, y muchos otros periódicos donde publicó cuentos, crónicas de viaje, versos. Secretario de Instrucción Pública y Bellas Artes durante el régimen del general Porfirio Díaz, se convirtió, como positivista y luego como spenceriano, en uno de los más importantes promotores de su proyecto educativo: fundó la hoy Universidad Nacional Autónoma de México (1910). Destacan sus ensayos Evolución política del pueblo mexicano (1900-1902) y Juárez, su obra y su tiempo (1906).
GABINO BARREDA
Médico, filósofo y político mexicano. Nacido en Puebla, fue alumno de Auguste Comte entre 1847 y 1851 en París e introdujo el positivismo en la tradición de la filosofía mexicana. Barreda creía que lo que no está en los límites de la experiencia debe ser considerado como inaccesible. Ejerció una importante influencia social y redactó por encargo del presidente Benito Juárez, vencedor de Maximiliano y de la reacción conservadora la Ley de Instrucción Pública de 1867, creó también la Escuela Nacional Preparatoria. En su Oración cívica, distinguió en la historia de México una etapa colonial, correspondiente al estado religioso; seguida a partir de la independencia por otra, el estado metafísico; preconizando el próximo comienzo de un periodo positivo. La influencia de Barreda se encuentra en el inicio de la tradición positivista en la filosofía mexicana. Una de sus obras más notables tiene por título De la educación moral (1863).


No hay comentarios:

Publicar un comentario